La Arquitectura Bioclimática consiste en diseñar edificios aprovechando los recursos naturales disponibles, tales como, la orientación con respecto al sol, la topografía del terreno, la vegetación... Así, conseguiremos un ahorro en el consumo de la energía y disminuiremos el impacto medioambiental que genera la construcción de una vivienda.
"Conseguir casas más calientes en invierno y más fresquitas en verano reduciendo la necesidad de usar las calderas y aires acondicionados."
De hecho, este tipo de arquitectura ni es nueva, ni tiene por qué ser muy sofisticada. Podemos tomar como ejemplos de Arquitectura Bioclimática las viviendas encaladas de Andalucía para evitar el calor, o la construcción de sus tejados y orientación de las ventanas según la orientación del sol. Teniendo en cuenta pequeñas consideraciones, se pueden conseguir excelentes resultados y grandes ahorros energéticos en el día a día.
¡Importante!: Muchas medidas llevan un coste inapreciable o insignificante.
En la actualidad, los clientes desconocen la importancia de demandar este tipo de construcción, y la mayoría de arquitectos y constructores tampoco lo tienen en cuenta.
Pero debemos saber que este tipo de arquitectura significa ahorro y confort, además de sostenibilidad (menos emisiones de CO2 y menos dependencia de los combustibles fósiles).
Una vivienda bioclimática, en caso de necesitar energía externa, recurren a las energías más limpias posibles; en primer lugar, energías renovables como paneles solares o fotovoltaicos; y en segundo lugar, energías no renovables menos contaminantes como el gas natural o biomasa.
Además, una vivienda bioclimática puede llegar a ser lo que se conoce como VIVIENDA DE ENERGÍA CERO. Ésto significa:
La realidad es que conseguir una Vivienda de Energía Cero en la actualidad aumenta un poco el coste de construcción. Pero debemos tener claro que es una inversión rentable, ya que el periodo de amotización es relativamente corto (pensemos en la vida media de una vivienda).